Industria del automóvil
En 2010, apenas el 28% de los estadounidenses de 16 años de edad tenía su licencia de conducir, en comparación con el 44% en 1980, según un estudio de la Universidad de Michigan.
Las ventas de automóviles en Estados Unidos se han recuperado en los últimos años gracias, en parte, a la demanda acumulada después de la Gran Recesión, pero la realidad es que la historia de amor de los estadounidenses con sus coches esta llegando a su fin.
Eso es en gran parte debido a la falta de interés entre los Millennials, que prefierenvivir en lugares transitables, urbanos con transporte público y servicios para compartir coche como ZipCar o servicios para compartir trayecto como Uber.
La industria de la televisión por cable
No está claro a dónde se dirige el video streaming pero está claro que el futuro probablemente incluirá nombres como Netflix y YouTube y no compañías de cable.
El año pasado, por primera vez, el número de cuentas de televisión por cable en EE.UU registró caídas, con un recorte de 250.000 suscripciones.
Es evidente que la industria está intentando sobrevivir, con Comcast comprando Time Warner Cable y AT&T tratando de apoderarse de DirecTV.
La industria de los refrescos y bebidas gaseosas
Las bebidas gaseosas y azucaradas como Coca-Cola y Pepsi han sido el elemento básico de la comida rápida de cualquier joven americano. Pero ya no, gracias a la batalla contra la obesidad infantil y el aumento de las alternativas más saludables.
Como resultado, los millennials beben mucha menos gaseosa y bebidas de este estilo. Un reciente informe de Morgan Stanley ilustra cómo las bebidas energéticas y bebidas deportivas están ganando adeptos, especialmente durante la última década.
Es por ello que Coca-Cola ha tratado de proteger sus cuentas a través de productos saludables y deportivos como Odwalla y Powerade. Sin embargo, marcas como Coca-Cola y Sprite se enfrentan a verdaderos problemas durante los próximos años.
Fuente: eleconomistaamericana.com
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